JĆŗpiter, enamorado de Alcmena, aprovecha la ausencia de su marido, Anfitrión, que estĆ” al frente de las tropas tebanas, para tomar el aspecto fĆsico de este y engaƱar asĆ a su esposa, con la que disfruta al comienzo de la comedia de una larga noche de amor.
Le acompaña y asiste, bajo la apariencia de Sosia, esclavo de Anfitrión, su propio hijo, el dios Mercurio, que, en el papel de fiel y astuto esclavo de comedia, estÔ dispuesto a todo con tal de favorecer los amores de su padre y señor. Y es precisamente en esta situación cuando se produce, tras el remate feliz de la guerra, el regreso de los verdaderos Sosia y Anfitrión, que va a brindar a los personajes divinos la posibilidad de burlarse de ellos y provocar las mÔs divertidas situaciones.

























